Summary
—¿No tendrás un color más brillante, querida? —preguntó observando su mano críticamente. Por alguna razón el color no terminaba de convencerlo. —¿Más brillante que brillos y cristales? —preguntó la bruja anonadada. Su cliente más importante de la década había resultado ser un viejo chiflado y estrafalario como habían dicho los rumores.