Summary
Yao no aguantaba más, es decir, sabía como quitarse a un acosador cualquiera de encima fácilmente, pero resulta que en este caso no era uno, sino dos, y no eran cualquieras, eran las dos naciones más insistentes del mundo ¡Soportarlos era peor que tortura china! y lo decía Él. Las cosas le parecen aun más complicadas cuando se les ocurre hacer una competencia ¡Él no era trofeo!