Summary
—Estás muy fría —susurró Ignatia, pegando la mejilla a la superficie. Heliotrope no sabía si reírse o llorar. Se colocó frente a ella, al otro lado del telescopio, y alzó la mano hacia Ignatia pero no la tocó. La dejó estática en el aire, decidiendo si estaba bien lo que planeaba hacer; esperó otro par de segundos antes de dejarla caer. (Heliotrope Wilkins/Ignatia Wildsmith)