Entonces mientras veía como levantarse de la cama, todas sus pesadillas momentáneas comenzaron a hacerse realidad cuando al mirar por el rabillo del ojo se dio cuenta que su compañero comenzaba a reincorporarse en la cama.
Chica de segundo año. Manager de Karasuno desde primero y secretamente enamorada de Hinata Shoyo. Dime, ¿estás viviendo tu vida escolar al límite?
Efímero e implacable. Un tiempo limitado. Ambos no son nada más que polvo estrella a punto de desaparecer o colisionar, quizás crear algo nuevo. Oikawa, veinte años, estudiante en Tokio y existencialista a tiempo parcial. En su nueva vida se encuentra con quien creyó haber dejado atrás hace tres años, en Miyagi. "Oikawa-san es como un bólido, inalcanzable".
Como un museo de arte que colecciona piezas de comienzos y finales, porque ambos deben comprender qué desean expresar en sus propios lienzos. Fueron como la diferencia acerca de un cuadro de Van Gogh y uno de Da Vinci.
"Sakamichi-kun, si vas a tener un novio por lo menos deberías prestarle igual o más atención de la que él te da a ti".
[Viñetas] [Kenma/Hinata] No importaba las demás cosas cuando estaban juntos porque se complementaban, de alguna manera extraña lo hacían y no estaba para nada mal sentir eso. Ninguno de los dos podía decir que se arrepentía.
Lo más probable es que si no fuera por el ciclismo Jinpachi no se hubiera enamorado y seguramente ahora tampoco estaría destrozado.
El chillar de la puerta resonó y entonces se encontró con la figura de Oikawa, quien transportaba en sus manos un pastel con una sola vela encendida y la sonrisa que tenía no se la quitaba nadie.
[Viñeta] Kuroo era una pieza primordial en su vida; como un pilar que lo sostenía, le ayudaba a moverse entre los demás y ser parte de ese algo que podía ser definido como la gran maquinaría que era el equipo de Nekoma, ¿qué haría cuando no estuviera?
[Viñeta] Ken de vez en cuando, se encontraba preguntándose a sí mismo: ¿Quién es esta persona parada frente al espejo? , y una pequeña voz en su mente le respondía: Eres tú, Kaneki .
[Viñetas] Dejando de mirarlos a ambos, vuelve la vista a cada jugador del nuevo Karasuno, quienes dan todo de sí mismos en la cancha.
[Viñeta] [Kenma/Hinata] "Si ese enano estuviera en tu equipo seguramente estarías más motivado". Kozume acepta que una de las cosas que más le gusta es mirar a Hinata, este o no jugando. Era una extraña forma de motivación que le gustaba.
[Viñeta] Ambos eran muy diferentes y contrarios, pero así funcionaba bastante bien. Tal vez era la ley universal de los Opuestos se atraen o porque se complementaban perfectamente, incluso en el juego. Donde uno era impulsivo, el otro era pasivo. Uno era gritón, el otro más silencioso. Uno tenía gran coraje y el otro un poco más tímido.
[Viñeta] Podía decir que todo era culpa de Nishinoya por hacerle caer en cuenta de aquello. Había pequeños detalles los cuales Kageyama efectuaba cuando estaba con su compañero y ni si quiera se había fijado, pero Hinata sí y para él significaba mucho.
[Viñeta] A Tsukishima no le molestaba del todo su presencia. Si realmente lo quisiera lejos, lo habría echado hace ya mucho tiempo. Aun así nunca lo había hecho porque, al fin y al cabo, lo apreciaba. Quería a Yamaguchi.