Aquella mañana, en su piso de Alcalá de Henares, abrazó a su novio y le pidió que se quedara con él en la cama unos minutos más. Poco imaginaba que la noche anterior los engranajes del destino se habían puesto en marcha y había puesto rumbo a algo que, sin duda, le iba a cambiar la vida.

Bajo todo el estrés provocado por la guerra y el poder, Antonio acepta la invitación de Feliciano y decide asistir al famoso Carnaval de Venecia, para ver si podía olvidar todo el estrés que descansaba sobre sus hombros. Lo que no sabía era lo que la noche veneciana le podía ofrecer.

Dicen que cuando pides un deseo fugaz a una estrella, cualquier deseo se cumple. Esa noche, Francis Bonnefoy pidió algo, una locura, creyendo que sería algo que jamás se cumpliría y su sorpresa sería cuando, a la mañana siguiente, viera lo equivocado que estaba. FRAIN. R18

Colección de drabbles Frain situados en diferentes universos (tanto canon, como alternativo)

En toda la universidad, Francis Bonnefoy era conocido por salir con la persona que se le declarara durante siete días. En ese tiempo, siempre ha intentado enamorarse fallidamente de la persona con la que salía. Lo que no esperaba era que, de repente, aquel chico que entrenaba con él en el equipo de fútbol fuese a decir algo por el estilo.