A sus 13 años, Jon Targaryen conoció el amor en un campo d niños refugiados durante la Segunda Gran Guerra, a través de los ojos de Arya Stark. En un mundo consumido por intrigas y engaños, la niña de ojos grises lo abrazó en una burbuja de paz; hasta que la guerra la reclamó. 3 años después Jon sigue buscándola preguntándose si Arya fue sólo un producto de su imaginación.

"¿Y si hubiera sido Kaoru en lugar de Tomoe?" La pregunta evidentemente lo toma por sorpresa, ni siquiera su usual "oro" consigue salir de sus labios esta vez, Kenshin hace un esfuerzo enorme por controlar el temblor de su corazón. Mas los dioses deciden que, una vida gastada en redención, merece el deseo de reescribir la historia... si tan solo con eso consigue salvar su alma.

Se dice que somos el eco de viejas voces. Que a veces hay amores tan fuertes, que su lazo se forma una y otra vez en vidas diferentes. El recuentro suele ser un flechazo intenso, una necesidad demasiado grande de 'atar' al otro y no permitirle alejarse. Por supuesto que para Kenshin nada nunca podía ser tan fácil, oh bueno, cuando menos ya no le llevaba 12 años de diferencia. AU

P/un vínculo como el suyo la muerte era apenas el comienzo. Incluso si sólo uno de ellos seguía con vida, la fuerza de aquél lazo volvería a unirlos. Con los papeles intercambiados y tras el amargo trago d una forzosa despedida a manos de la muerte, Ichigo tendrá q enseñarle a una renacida Rukia cómo ser un shinigami sustituto. Eso, sin perder la cordura y el corazón en el intento.