Quizá se llame destino, o sea simplemente la respuesta a los esfuerzos y la voluntad de algunos, pero lo cierto es que ni el tiempo logra a veces romper los delgados hilos que conectan a aquellos que por alguna razón deben mantenerse unidos.

Las cosas no serían las mismas de ahora en adelante, y era momento de adaptarse a ello; por los que se fueron, por los que se quedaron, por lo que habían dejado atrás y por lo que se aproximaba, era tiempo de continuar. Una visión alternativa de lo que podría (me gustaría) hubiera sucedido luego de la disolución de Fairy Tail.

"No importa el tiempo que pase, incluso si nuestros mundos son diferentes, reflexionando acerca de los recuerdos que tenemos de aquellos días irreemplazables, iluminando por siempre lo que apreciamos desde nuestro corazón, esos días de adolescencia serán mi guía."

No importaba el tiempo, tampoco la diversidad de decisiones tomadas, todo se resumía a ese momento, su reencuentro. Los lazos que unían al equipo 7 siempre estarían allí, aun si fuera necesario morir para preservarlos, "..aquellos que rompen las reglas son escoria, pero aquellos que abandonan a sus amigos son peor que la escoria."