Isabella es una criminal de clase mundial. Espía, traficante de arte, ladrona, asesina. Edward Cullen es un buen policía, obsesionado con atraparla. Una noche su tan ansiada oportunidad al fin se presenta, pero tendrá que elegir. Arrestar a su enemiga... o ayudarle a efectuar su venganza.
Durante cuatro años Isabella ha logrado mantener sus dos vidas en equilibrio y su secreto a salvo; hasta la noche que conoce a Edward, un hombre maduro, elegante y reservado. Ambos se dejan llevar por lo que sienten, creyendo que solo sería un momento que recordarían el resto de sus vidas, sin saber que inevitablemente y más pronto de lo que creían, volverían a encontrarse.